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Larreta respaldó a su policía y abogó por la calma
En medio de una serie de llamadas y entrevistas periodísticas, Horacio Rodríguez Larreta supervisó el caso del activista de izquierda Facundo Molares (exintegrante del grupo terrorista FARC de Colombia), quien falleció en el Obelisco luego de participar en una marcha inusual con menos de 25 personas, organizada por un movimiento de izquierda de escasa representación. Aunque tenía claro que, a raíz del primer informe oficial proporcionado, debía respaldar las acciones de la Policía de la Ciudad. Las imágenes y los testimonios de sus funcionarios le proporcionaron los argumentos necesarios para mantener esta postura.
No obstante, en estos días, Larreta estuvo más ocupado de lo habitual: mantuvo consultas constantes con su equipo sobre discursos y concedió más de veinte entrevistas en las últimas 36 horas antes del inicio de la veda, que tuvo lugar a las ocho de la mañana de ayer.
El respaldo a la fuerza de seguridad de la ciudad fue uno de los puntos clave, junto con la posibilidad de implementar el plan nacional para esta área, el cual desarrolló en conjunto con su compañero de fórmula a la vicepresidencia, el radical Gerardo Morales. El plan abarca diversos aspectos, desde la lucha contra el narcotráfico hasta la creación de un grupo de élite dedicado especialmente a combatir a las bandas de narcotraficantes, además de reforzar la presencia de fuerzas federales en lugares conflictivos como Rosario o el conurbano bonaerense.
Sin embargo, todo dentro de un contexto particular: Larreta nunca dejó de mencionar las palabras “tranquilidad” y “cambio profundo”, estableciendo así una diferenciación con Patricia Bullrich. Aunque recibió con una sutil sonrisa la noticia de que la precandidata presidencial también respaldó a la Policía de la Ciudad, no se desvió de su guion. Incluso en la semana pasada, con la ayuda crucial de María Eugenia Vidal, quien hizo campaña por él en Córdoba, Mendoza y Entre Ríos.
El cierre en La Plata, con Diego Santilli –un factor crucial en la elección de mañana en la Provincia– y con un intendente también importante como Julio Garro –quien se mostró enfadado con Bullrich por no permitirle llevar a ambos precandidatos presidenciales– iba a ser un evento con gran energía: se esperaba la participación de precandidatos de todo el país para una foto conjunta. No obstante, el caso de Morena forzó su cancelación: justo después de que se suspendiera el cierre de Bullrich, el jefe de Gobierno optó por poner fin a sus eventos en ese momento.
En el círculo de asesores, existe incertidumbre acerca de a quién beneficiará el descontento social de la última semana, pero sugieren que podría surgir un voto inesperado para Javier Milei, que no se encuentra registrado, o en su defecto, una mayor disminución en la participación de aquellos descontentos con “la política”.
Si esto favorecerá a Larreta o no, está por verse. Con una menor participación, las maquinarias y los actores políticos locales ganan mayor relevancia. Dependiendo de la provincia, más del 70% de la estructura territorial del PRO y la UCR se encuentran alineados con el jefe comunal. Sin embargo, esto sigue siendo una incógnita.
Por lo pronto, mañana por la mañana, el precandidato presidencial, acompañado por Santilli, desayunarán en Tigre antes de dirigirse a votar. A las 10.15, Larreta emitirá su voto en la Facultad de Derecho y luego pasará parte del día en su departamento.